Anamaría Briede Westermeyer


Anamaria Briede (Valparaíso, 1971). Artista visual y poeta. Estudió arte en Chile y Alemania.
Ha hecho exposiciones individuales y colectivas en diversas salas de Chile y el extranjero. Museo Nacional de Bellas Artes y Museo de Arte Contemporáneo Stgo de Chile, Kunstmuseum Ahlen y Museum im Kulturspeicher Wuerzburg ambos en Alemania. Durante los últimos años ha incursionado en la poesía experimental, visual, tactil y sonora. Actualmente está desarrollando un trabajo de investigación entre dibujo, poesía, sonido y espacio. Trabaja en colaboración con la poeta Agatha Grodek. Ha publicado CINCO: Columna Vertebral del Cuerpo (libro + CD) (Colección Foro de Escritores, Santiago, 2005, ISBN 956 8389 02 4).

Menciona a:

Nancy Gewoelb
Andrés Anwandter
Claudio Bertoni
Cecilia Vicuña
Luna Montenegro
Soledad Fariña
Kurt Floch
Martin Gubbins
Felipe Cussens

Poesía:








Alejandra Basualto

Fotografía: Cristóbal Ladrón de Guevara

Alejandra Basualto. Nació en Rancagua, Chile, el 1 de diciembre de 1944. Se formó en los talleres literarios de Miguel Arteche, José Donoso, Alfonso Calderón y Pía Barros.
Es Licenciada en Literatura y Egresada de Doctorado en Literatura Hispanoamericana de la Universidad de Chile. Cultiva tanto la poesía como la narrativa, especialmente el género cuento. Su labor como directora de talleres literarios la ha llevado a conducir talleres en ambos géneros en la Facultad de Filosofía y Humanidades de la Universidad de Chile, y otros talleres de escritura creativa en varias universidades e institutos privados, como Balmaceda 1215. También lleva a cabo esta labor en el Instituto Cultural del BancoEstado y en su taller particular La Trastienda.
Desde 1991 dirige la Editorial La Trastienda, donde ejerce como editora y diseñadora. Ha dirigido en Chile un programa para alumnos extranjeros de La Humboldt State University por un semestre al año, durante 4 años consecutivos, también hace clases de español intensivo y literatura.
Los útimos años ha sido nominada como Jurado en diversos concursos literarios de cobertura nacional.

Ha publicado:
Los ecos del sol, poesía, 1970, Offser Service, Santiago.
El agua que me cerca, poesía, 1984, Taller Nueve, Santiago.
La mujer de yeso, cuento, 1988, Ed. Documentas, Santiago
Territorio Exclusivo, cuentos, 1991, Ed. La Trastienda, Santiago.
Las malamadas, poesía, 1993, Ed. La Trastienda, Santiago.
Desacato al bolero, cuentos, 1994. La Trastienda, Santiago.
Altovalsol, poesía, 1996, Ed. La Trastienda, Santiago.
Casa de citas, poesía, LOM Ediciones, 2000, Santiago.
Además, publicada en diversas antologías en Chile, Estados Unidos, México,
Francia e Italia.


Menciona a:


Carmen Gloria Berríos
Teresa Calderón
Malú Urriola
Paz Molina
Astrid Fugellie
Rosabetty Muñoz
Eugenia Echeverría
Jorge Montealegre
Miguel Arteche
Paulina Valente
Luisa Eguiluz


Poesía:


Del libro “Casa de citas”:

CANCIÓN PARA CAPERUCITAS
No le digan a los carniceros / que en cada vaca hay un cisne.
Hernán Rivera Letelier


Muchacha,
huye del cuchillo
cuando aún sea posible, cada seductor
es un larvado carnicero.

No permitas que sus dedos terroristas
se cobijen en tu espalda,
sólo quieren arrancarte las plumas.

No dejes que su boca besadora
deslumbre de algas tus pezones
o derrame aromáticas especias
sobre tu vientre acurrucado.

Jamás cultives en tu Monte de Venus
perfumados verdores de perejil
de albahaca ni tomillo
que sólo despertarás sus apetitos.

Arranca de tu jardín todo asomo de laurel
y oculta el oloroso diente del ajo campesino;
no vaya a ser que hierva la avaricia
en el fondo oscuro de la olla
y el seductor no pueda contenerse
e introduzca en el agua alborotada
el bello cuerpo implume
que entonces ya serás.


TRIAL AND ERROR
Apenas laten hoy / las partes que mucho te extrañaron
Margarita Laso


Como si fuera poco haber derrochado por años
la sal y el agua en el lloradero
hoy has resuelto –sin más- evaporarte.
Ni huella de tu presencia me has dejado
para el resuello cotidiano.

Mejor así que aprendo fácil
Ensayo y error
+
paciencia paciencia paciencia
hasta dar en el clavo:

No en balde dicen que la física
se sostiene de atmosféricos milagros:
apenas corre el sol por los húmedos tejados
el ojo se vuelve a secar
y nuevos gatos iluminan agosto.


MUROS
Confianza en muchos, pero ya no en uno
César Vallejo


De cuando en cuando vagabundeo
escribiendo graffitis por las noches.
Quiero violar la blanca fisonomía de los muros,
la urgente monotonía del silencio
que me dejaron aquellos / los ausentes,

esos puros muros
donde ya ni los perros se detienen a mear.


SÁLVESE QUIEN PUEDA
Para que me amaras / maquillé yo mi rostro de negro
Marina Arrate

Junto a esta luz recién apagada
tendré miedo por última vez:
no quiero más deudas de aliento,
ni aquel hombre de bronce,
ni la muchacha en el camino.

Apenas diviso ya tus ojos, algunas piedras,
un cuerpo solo.
Oigo pedernales chasquear en lo oscuro,
fustigan esta carne que aún es mía.

Sálvese quien pueda
gritan mis fantasmas y se abrazan
a modo de exorcismo.

Duelo sangro sudo
y en la bóveda
el reflejo
de una rojez desgastada.



ÚLTIMA PRIMAVERA
Sé que un día de éstos / acabaré en la boca de alguna flor.
Blanca Varela


Cegadora y arbitraria entró como un torbellino
para destriparme, la primavera.
me succionó la médula,
forcejeó con mis aprensiones hasta metérseme dentro
y tuve que verla en su verdor inexcusable,
tuve que olerla hasta la náusea,
y ella hubo de arrebatarme
hasta mis nubes más ocultas.
Quedé con el corazón en descampado, desprovisto
de telarañas y puñales / calato en su calabozo.

Engañosa luminosa
me humilla con su mascarita de flores
y sus pajaritos recién brotados,
pero el memorioso que llevo dentro no cesa de gritarme
que no le crea / que se irá de un día para otro
con su risueña costumbre de madreselva.
Y luego tendré que construirme pabellones y huesos
y costillares y verjas de feroz apariencia
para guardarme y protegerme
de sus besitos pintados.

Stella Diaz Varín

Fotografía: Elsa de Veer

Una sola será mi lucha y mi triunfo; encontrar la palabra escondida...


“No. La poesía no es una ecuación biológica. La poesía, si tú la pudieras definir -porque es indefinible- es un arranque sentimental, es una memoria de otro arranque sentimental, nada más”. De personalidad polémica y rupturista, integrante de la Generación Literaria de 1950, Stella Díaz Varín se perfiló como una voz singular y trascendente en la historia de la literatura chilena. Su poesía fue una expresión original, que plasmó su fuerte personalidad creativa y bohemia, con una perspectiva femenina. Nació el 11 de agosto de 1926, en La Serena. El 1 de mayo de 1947 llegó a Santiago para estudiar medicina, con el firme propósito de especializarse en psiquiatría, carrera que no concluyó. En cambio se integró activamente a la Alianza de Intelectuales de Chile -dirigida por Pablo Neruda- y a los círculos culturales de la época, sobretodo a la mítica bohemia de El Bosco, donde cultivó amistad con destacados creadores nacionales como Alejandro Jodorowsky, Enrique Lihn, Ricardo Latcham, Mariano Latorre, Luis Oyarzún, Jorge Teillier, José Donoso, entre muchos otros. En ese período comenzó a colaborar en algunos diarios nacionales como El Siglo, Extra, La Opinión y La Hora; al mismo tiempo que participó en las diversas actividades generadas por la Sociedad de Escritores de Chile. En 1949 publicó su primer libro, Razón de mi ser. Los poemas de este volumen reflejan la vitalidad y fuerza de la poetisa. A través de imágenes sugerentes y de un lenguaje subterráneo, temas como la muerte, la soledad y el reconocimiento a la condición femenina, evidencian en este poemario la relación inseparable entre la vida y la creación poética de la escritora. Su producción literaria continuó con Sinfonía del hombre fósil (1953), Tiempo, medida imaginaria (1959) y Los dones previsibles (1986). Este último libro recibió el Premio Pedro de Oña en 1986, y su publicación incluyó un prólogo de Enrique Lihn, en el que señaló: “Esta imagen del poeta, la afición a la magia del lenguaje asociada a la realidad como acto verbal imperativo y otras características, delatan aquí -con la desvergüenza al uso de mi generación- cuentas pendientes con el romanticismo, el decadentismo y el simbolismo”. Aunque fue reconocida tardíamente por una pequeña parte de la crítica especializada, su poesía marcó nuevos rumbos en la creación poética nacional. Fue incluida en numerosas antologías, entre las que destacan Poesía Nueva de Chile (1953); La mujer en la poesía chilena (1963); y Atlas de la poesía chilena (1958). Con una dilatada trayectoria en las letras nacionales, Stella Díaz Varín reivindicó el oficio de poeta desmitificándolo, denunciando las carencias de esta labor: ”Yo creo que deberíamos preocuparnos un poco de que el poeta deje de ser una especie de ser mítico, alado y peregrino. El poeta es un ser humano con familia, con necesidades biológicas y necesidades de todo tipo, al que nadie le da boleto en este país (...) por lo menos me gustaría que el hombre creador tuviera una base y una mínima seguridad de vida para que pudiera seguir creando”. A pocos días de haberse hecho acreedora del Fondo del libro en su versión 2006, por el volumen "Stella extragaláctica", Stella Díaz, falleció. Sus funerales se realizaron el 15 de junio de 2006.



Poesía:

LA PALABRA

Una sola será mi lucha
Y mi triunfo;
Encontrar la palabra escondida
aquella vez de nuestro pacto secreto
a pocos días de terminar la infancia.

Debes recordar
dónde la guardaste
Debiste pronunciarla siquiera una vez...
Ya la habría encontrado
Pero tienes razón ese era el pacto.

Mira cómo está mi casa, desarmada.
Hoja por hoja mi casa, de pies a cabeza.
Y mi huerto, forado permanente
Y mis libros cómo mi huerto,
Hojeado hasta el deshilache
Sin dar con la palabra.
Se termina la búsqueda y el tiempo.

Vencida y condenada
Por no hallar la palabra que escondiste.


PROFECÍA

Las grandes ausencias amenazan
Cuando los sirlos
Esos bellos pájaros
Emigran
Y la lejanía hiere sus alas
El hombre no lo sabe
Porque duerme
Oculto por causa de la luz
Para no prever la muerte.

Entrega el dominio de sus sueños
Y emancipa el caos
Y pierde el podersobre su propio río
que lo recorre en longitud.
Los abismos se acercan
Y las múltiples aguas
Devienen creaturas de espanto.

Uncido al gran anillo
Olvidará su trayectoria astral
su fecundidad perecedera.
Ocurrió
Que cerró las pupilas ante la luz
Y no estuvo más allá
De las cosas presentes
Ni creó una analogía superior
a la distancia entre los astros
Ni escuchó el soberano mandamiento
De crear al hombre verdadero.

Olvidado en el tiempo
Aún persistirá en creer
que fue un símil de su conciencia.


TRASLUZ

Que se me permita mirar por la ventana
Sólo el espinazo de la muerte
A tranco largo
Mirando fijamente
A mis ojos deslucidos.

Veo la ausencia
Doblando por la esquina
La miserable luz
De los días empañados.
Muy de tarde en tarde
Algún aprendiz de hombre
Vestido de domingo.
En estas agonías neblinosas
Estoy mirando desde una ventana ajena
Tras la luz de este rincón desconocido
Desde esta ventana hacia ningún paisaje
Hueco sin distancias
Seca pupila donde no resplandece
ni el más leve trino.
BREVE HISTORIA DE MI VIDA

Comando soldados.
Y les he dicho acerca del peligro
de esconder las armas
bajo las ojeras.
Ellos no están de acuerdo.
Y como están todo el tiempo discutiendo
siempre traen perdida la batalla.

Uno ya no puede valerse de nadie.
Yo no puedo estar en todo;
para eso pago cada gota de sangre
que se derrama en el infierno.

En el invierno, debo dedicarme
a oxidar uno que otro sepulcro.
Y en primavera, construyo diques
destinados a los naufragios.

Así es, en fin...
Las cuatro estaciones del año
no me contemplan, sino trabajando.

Enhebro agujas
para que las viudas jóvenes
cierren los ojos de sus maridos,
y desperdicio minutos, atisbando
a la entrada de una flor de espliego
de una simple abeja,
para separarla en dos,
y verla desplazarse:
la cabeza hacia el sur
y el abdomen hacia la cordillera.

Así es
como el día de Pascua de Resurrección
me encuentra fatigada,
y sin la sombra habitual
que nos hace tan humanos
al decir de la gente.

BESOS STELLA, DONDE QUIERA QUE ESTÉS RECITANDO TUS VERSOS

Lila Calderón


Lila Calderón. Santiago de Chile, 1956. Comunicadora Audiovisual y Escritora, Magíster © en Estudios Latinoamericanos de la Universidad de Chile. Ha publicado los libros de poemas Balance de blanco en el ángel triste de Durero, 1993; In Memoriam, 1995; Por suerte había otra vida y Piel de maniquí 1999. Durante el año 2002 publicó los libros: Animalia (cuentos), La gran fuga (cuento) y La ciudad de los temblores (novela infantil), Ediciones Books and Bits, Santiago, Chile.

En 1994 obtuvo el Primer Premio de Video-poesía de la Feria Internacional del Libro de Santiago de Chile y el Premio de Adaptación de Guiones de Cortometraje Luchino Visconti del Ministerio de Educación.

En 1998, obtuvo el Primer Premio en el Encuentro de Cine y Video del Caribe con La muerte de un poeta, homenaje al poeta cubano Ángel Escobar (Video-experimental). Ejerce la docencia en la Universidad Diego Portales y en Arcos. Su obra poética se encuentra compilada en diversas antologías, tanto de Chile como del extranjero.

En el año 2005 expuso en la Biblioteca Nacional: “Liquidación por cambio de temporada”, un conjunto de ensamblajes creados a partir de materiales heterogéneos y objetos encontrados.


Menciona a:

Damsi Figueroa
Lila Díaz
Karen Toro
Grandchester
Carolina Castro Carreño

Poesía:

Desplazamiento

Me desplazo a la segunda fotografía pero dudo por lo caótica/ Se adelanta/ Retrocede/ Se esconden me interrogan y no sé qué contestar/ y en esa magnífica confusión llego a preguntarme si es falso/ que sea verdadero o verdadero que sea falso/ Las imágenes envejecen y los muertos eluden el encuadre/ Las fotografías tienen su propia religión y viven en otro templo/ El pasado y el futuro de una cinta de video es circular/ qué hay más atrás el principio o el final/ Pero más atrás es el pasado y por lo tanto el principio/ y yo prefiero cerrar los ojos y preguntarme qué hago aquí adelante/ Delante de todos mis recuerdos y detrás de las palabras/ pero presente mirando a todos estos grandes y odiosos mitos/ Señores faranduleros directores de países mariscales en jefe/ contralores generales políticos jugadores de la historia/ y luego pienso verdaderamente en lo falso que parece todo lo que es cuestión de tiempo/ y de finales o principios/ mientras intento no oír la sirena de la ambulancia que anuncia a la Muerte/ No estoy en un barco/ Estoy en el centro de Santiago sentada en el escaño de un ilusorio paseo peatonal/ mientras dejo pasar el tiempo frente al local de revelado urgente/ Sólo hace falta una hora para saber si existieron/ Si todos ellos estaban entre los que pasaron de largo/ ejercitándose en no ser robados en no oír a las sirenas/ En no saber cuál es el principio cuál es la meta qué es un final/ Se cumplen los horarios y comienza la canción de las cortinas metálicas/ La policía refuerza los puntos luminosos los candados crujen/ Un vagabundo que aflora desde las alcantarillas se sacude la nada y se velan con él las fotografías y las visiones/ Dónde ir/ Es posible señores volver al principio volver al final ser simultáneos/ Ser y no ser con libertad de acción/ hacerle zancadillas a los reflejos del pasado/ a las proyecciones del futuro a la vida al paso/ a los gritos preparados/ al vino rojo que cae desde el barco en donde cantan las sirenas y bailan los náufragos/ bajo la luz crepuscular/ de un verano que siempre sonríe entre el rock y el shock/ porque puede ser el último verano de las fotografías

(Del libro inédito Sangre Naranja)


La representación de la tierra
(Fragmento)

La postal se abre
Un tríptico de El Bosco e x t i e n d e sus carruseles
sobre la malla de feria del globo
ocular
Proyección del ser y estar Representación
de la superficie terrestre
No encarnamos lombrices
no dejamos humus
ni la mueca curva de la ironía salvadora

La superficie es toda nuestra vivimos al aire
El planeta es un rondó carnívoro
E s t á t o d o t a n a m a r r a d o q u e e l t i e m p o
no tiene más que dejarse llevar
por el desliz del vapor
y hacer girar la confusión de esperpentos
entre el
Pasado Futuro
vagando en su anfiteatro como oráculos en pena

Todo ritmo
Es máscara luz contraluz
sedimento capa metamorfosis
No conoces a nadie
pero la diversión está que arde
enciendes un cigarro
te preguntan por qué hay tanta oscuridad
Es una pesadilla terrenal dicen
qué quieres
la felicidad cuesta caro
y hay que seguir soñando

Cuánto falta
No conozco a nadie dónde fueron

Luego leerás los avisos
+ Nadie escapa al obituario
+ Nadie escapa al obituario
+ Nadie escapa al obituario
+ Nadie escapa al obituario
+ Nadie escapa al obituario

Es usted realmente

A veces la interrogante está en un libro
En un poema que algún fantasma dejó
sobre su mesa de noche
Junto a los restos
que el sol borró al salir
Sólo se oyen onomatopeyas ahora
No comprendo
las señales
Hay música grabada
Libros escritos
Escenas de cacería
pintadas sobre un sueño milenario

Se oyen los aplausos los gritos de sorpresa
la carrera desbocada
de los bisontes
las risas las risas las risas
las risas
las risas las risas las risas
de los que creíamos asistir a un programa en vivo

Un escenario lleno de vidrios
marcado con tizas
huellas
sobre
huellas
No es posible dar un paso en falso
sin caer al vacío

Como los ahorcados de El Bosco
abrimos los ojos
sacamos la lengua
sin saber hasta dónde
extender la utilería

Si creer en la muerte como un acto irrepetible
Si creer en la muerte como un acto irrepetible
Si creer en la muerte como un acto irrepetible
Si creer en la muerte como un acto irrepetible
Si creer en la muerte como un acto irrepetible
Si creer en la muerte como un acto irrepetible

(Del libro inédito Animal Cautivo)


Juguemos a la ronda ahora que el lobo no está
A Teresa y Cecilia

¿Lobo está?
Seguiremos cantando en el fondo del patio
mientras los muertos duermen la siesta
y nosotras bailamos con coronas de flores
porque no creemos en el lobo
Sabemos que el juego es sólo para hacer tiempo
mientras llega la hora
de decir adiós
y comenzamos con la carga de lastre
para llevar a la otra vida
a celebrar
porque vencimos desde el primer grito
cuando nos dieron la luz
la vida cotidiana
con su cuota de confusión y urgencia

Ahora que tenemos la llave para abrir la habitación
Barba azul elude su condena
y volvemos a jugar en el fondo del patio
a abrir las cartas y recibir instrucciones
como correr a paso de gigante para abordar el destino
o escapar del carrusel sin rumbo
de la feria de diversiones
Ahora el riesgo es mucho mayor que saltar la reja
para ir a ver charlatanes
hipnotizar culebras
buganvillas flotando sobre el mar
o mosaicos portugueses
que el sol encandilaba
en la estación de trenes que ya no existe

Es posible que el falso lobo continúe persiguiendo niños
que no se coma la comida
porque es el estrés de sobrevivir
su verdadera historia de terror
Nos ponemos espinas de rosas en la nariz
simulamos ser rinocerontes jabalís dinosaurios
habitar el averno
¿lobo está?
y dejar que el eco
nos conduzca al mito
con un falso trébol de cuatro hojas
o un poema al revés de la memoria
Cavamos en el huerto en busca del tesoro
que aún hoy espero recoger
pero Cecilia como reloj de Dalí
tan escurridiza
se cae del improvisado columpio
de cortinas que le hicimos
y vuelve del vuelo para quedar inconsciente
como muñeca rota
sobre la alfombra oriental
Le gusta parecer una muñeca rota
o estar al borde del precipicio
ser la que cae
la que se aterra
la que llama a la muerte
con otro nombre

La idea fue mía
la culpable es la fragilidad humana
un columpio revelado como zarza ardiente
idea genial que se balanceó sobre las cuatro paredes
que cercaban el bosque
¿lobo está?
me escondo
Cuando llaman a la puerta lo niego
y camino hacia el colegio o al hall del cine
a mirar fotogramas y desaparecer en el decorado
o en el sarcófago de la momia
pasando lista en la sala de clases
No sé por qué lo hice
me dolió el estómago
cuando supe que iban a vacunar
nunca más lo juro
A Cecilia ahora hay que cuidarla
como si fuera de papel
muñequita recortable
prepicada
de diseño fatal
de polvo que vuelve al polvo al menor soplo
¿lobo está?

Teresa está feliz
sabe que algún día será cisne
alarga las piernas y pinta sus uñas
de cardenales y ruiseñores
Con pétalos nacarados
espera al príncipe
que caerá desde el caballo
en cámara lenta hacia sus brazos
Los príncipes no están acostumbrados
a cerrar las cortinas sin recibir aplauso
y desaparecen tras la escenografía
hasta desvanecerse en los bosques del recuerdo
Ellos mataban lobos para disfrazarse con su piel
pero estaban tan asustados como nosotras
y se cubrían el rostro para que no los reconociéramos
mientras estudiaban donde depositar
el ADN de la perpetuidad
y sentían el peso de las cadenas
al descubrir que el verdugo del tiempo
vivía en esta misma casa
jugaba los mismos juegos
y se enrollaba en el espiral genético
hasta dar en el blanco del cuaderno de croquis
La libertad gritaba Acción
como un apasionado director de cine
que convocaba extras y les pedía
no se deslumbren con los reflectores
de la vida real
no miren hacia la cámara
no prueben la fruta
no beban el vino
sonámbulos
perseguidos por sus papeles
como si los acechara la misma muerte
o la misma vida

Ahora corran hasta marear al día
que venimos encadenadas
y si una cae bota a las otras
y las otras se ponen de pie para levantarla
las tres gracias encendidas
aunque corra sangre por las calles
que están llenas de ánimas sin nombre
de casitas de juguete
pintadas de blanco y con flores de papel

Levántense
escriban cartas para esas casas sin número
terminen los libros
y no los dejen morir de sed en el desierto
Pónganse todas las joyas las ropas
unas sobre otras
como vendas de mortaja
como telas de cebolla para botar en el camino
No hay que perder la huella
en el bosque o el retorno
¿lobo está?

Levántense por las noches
para asustar a la platea
ensayen frente al espejo
terminarán creyendo en lo que ven
y plasmarán su imagen para siempre
en la eternidad
allá donde no importa quién es quién
ni lo que quiere reflejar
Lo que importa
es no caer de los falsos columpios
ni apoyarse en barandas de utilería

Lo que importa es respetar el turno
para tomar el tren
a esperar a la vida
que algún día conoceríamos
Algún día
cuando despertáramos de la siesta
y apagáramos las velas de la torta
pensando en los regalos
y así antes de abandonar la fiesta
una a una
en el camarín común de nuestra generación
nos esperen con luces y flores
uno a uno
los ecos de nuestros nombres
repetidos por espectadores voceros
del obituario universal
al cual también llegarán a dormir la siesta
en silencio
para que los demás puedan vivir en paz
¿lobo está?

(Juguemos en el bosque ahora que el lobo no está)

(Inédito)

http://lilacalderon.blogspot.com/
http://wwwanimalcautivo.blogspot.com/

María Inés Zaldívar


María Inés Zaldívar (Santiago de Chile, 1953). Recibió el título de Profesora de Castellano en la Universidad Católica de Chile, el grado de Magíster en la Facultad de Filosofía y Humanidades de la Universidad de Chile (ambas universidades en Santiago), y el de Doctora en Literatura en la Universidad de Rugers, New Jersey, Estados Unidos.
Es autora de los libros Reiterándome, o la elevación frente a la negación, ensayo sobre cuentos de Myriam Bustos Arratia (1994), La mirada erótica, ensayo crítico acerca de la poesía de Ana Rossetti y Gonzalo Millán (1998), Literatura chilena: la fructífera producción de un siglo: 1905-2005, (2006) y de diversos textos sobre literatura y crítica plástica publicados en revistas especializadas tanto en Chile como en el extranjero.
En poesía ha publicado Artes y oficios (1996), Seis poetas de la República (1997), Ojos que no ven (2001) y Naranjas de medianoche, (2006).
Actualmente es profesora de Literatura en la Facultad de Letras de la Universidad Católica de Chile en Santiago, y directora de la Revista Taller de letras de dicha facultad.

Menciona a:

ARTE DE CERRAR UNA VENTANA (de Artes y oficios)




Cerrar una ventana sin
apretarse los dedos es
un arte


Cerrar una ventana y
no morir de asfixia
un prodigio


Cerrar una ventana y
no morir de pena
una proeza


pero cerrar esta ventana
con los dedos atrapados
sin huir por la puerta de salida o
de entrada y
decir adiós tras el cristal
con la mano ensangrentada
me conmueve hasta las lágrimas.
NIÑA BAJO LA MESA DEL COMEDOR (de Ojos que no ven)


1. Arriba


Tanto pariente, tantas cosas, tantas casas,
tanto empeño, tanto trabajo, tantos desvelos,
tanto embeleco sobre la cómoda, tanto papel revuelto
por todo el piso y hojas blancas y sucias con pies y
manos y labios en la solitaria pieza vecina y
tanta familia familiar reunida y ruido, y ruido y
tanta foto a color y en blanco y negro y
la familia ante todo, cuidado con las palabras y
el comentario y ese gesto procaz que los niños
uno nunca sabe, el ejemplo, el ejemplo, ¿a ver,
haber?


Tanto orden, tantos cuidados, tanta norma, tanta educación
tanto viaje, tanto comentario, tanta lindura, tan habilosa
tanto cubierto y servilleta y mantel con plato y copa,
tantos manjares, y fuentes y bordados en el mantel.
Tan cumplido es un encanto, un verdadero encanto y
tanto éxito, tanta fineza, tanto deber, tanto deber siempre
para que lo gocemos todos, en postales, en recuerdos,
qué responsable, el deber ante todo el deber siempre
¡qué amor, pero qué amor!


Tanto adjetivo, tanto adverbio, tanto grito
tanta soledad y hambre en el estómago
¿dónde está el sustantivo y la cocinera
y la cocina, para comer con las manos y en silencio?


2. Debajo


Una suave y pesada cortina de pestañas,
una fragante mortaja de lino en el iris,
un destello eterno de luz en la pupila,
ocultan tras un astigmatismo sagrado,
tornasol,
bastillas mal planchadas, costuras desprolijas de vestidos
avaros olores escondidos de ratas que no besan la mejilla,
geografía decadente de venas azuladas sobre lechosos cauces
y una cancha limpia por donde recién
hace un par de horas pasó,
implacable,
la hoja de afeitar.


ROSA ESPINOSA (de Naranjas de medianoche)


Arbusto de talles profusos vestidos de sedas
raíces curvas, hojas doblemente dentadas
pálidas flores de rosa y abultados vientres
rojos llenos de semillas que se llevan el color
para que lo beban niños con falta de apetito.
Rosa Silvestre. Rosa en la cocina. Rosa de pelea.


Arbusto de brazos bronceados cubiertos de vellos
hojas verde oscuro y flores de múltiples pétalos
Rosa pálida, Rosa encendida, Rosa puro blanca,
Rosa amarilla de sol, Rosa azul en busca del té,
Rosa Dulcinea, de corolas compactas y agradable
perfume para ungüentos, aguas, aceites
y cremas, baños, boticas, tisanas y heridas.
Rosa centifolia. Rosa común. Rosa en la sala.


Arbusto espeso con ramas cubiertas de espinas
fruto ovoide y oblongo, brillante y coriáceo
para gárgaras, colirios, cataplasmas y baño ocular
flor siempre flor, suave laxante de penas de amor.
Muda la hoja, cambia el color, difiere el aroma.
Rosa canina. Rosa en la cama. Rosa en la tumba.
Rosa Espinoza.


MEDUSA EN LISBOA (de Naranjas de medianoche)


1.
Camino por calles, subo y bajo,
llego al metro, no de Santiago, de Lisboa
(no conozco el metro de Lisboa)
y entramos.
Mi boleto tiene la forma de una ficha;
una vieja ficha bibliográfica en blanco
y oigo
tienes que ponerla en el control magnético
para salir
(sí, para salir de los túneles)
así de boca, boca abajo,
la superficie de la ficha sobre el control
que es algo así como el quemador de una cocina,
como boca viviente que se abre a la superficie.


Boca con boca la pongo y siento un estremecimiento.
Ruido, luz y energía brotan con violencia
y se estampa una imagen en la superficie blanca,
más que una imagen, un leve relieve,
una pequeña máscara muda.


En un golpe de respiración inhalo aire de conjuro y
un montón de palabras dislocadas como muñeca de trapo
manotean, patalean desarticuladas en mi garganta.


Aterrada te miro, te vuelvo a mirar y
mentalmente tiento el habla.
Un resuello de palabras se desliza salvador
inundando aquel instante con un nombre.
Medusa en Lisboa expelo y te llamo y
converso en el instante unos cuantos adjetivos
salvavidas:


2.


Carita pequeña, leve volumen a cincel
cabal y rotundo de tristeza no aprendida
tu sonrisa es cicatriz de herida siempre abierta
tu dolor es sello para siempre en mi pupila.


Carita pequeña, sólida mueca interminable
de cuencas siempre alertas al horror
me miras helada desde el hueso
desde el hueco interminable de tu ser.


Carita pequeña, burla abierta a la razón
de lengua sin gobierno y cuerpo no vidente,
sonríe aguda risa que chilla en la caverna
y hiela la sangre en las puertas del festín.


Toda tu cara niña es mueca que habla por sí sola:
cara es cuerpo y cuerpo cara.
Tus ojos grandes y vacíos me miran con desprecio
me atraviesan y me clavan como insecto.


En lo que canta un gallo tu pequeña nariz abre
fosas abisales
y huele estrujando mis alientos y vahos escondidos,
mientras tu boca devora a control remoto,
y luego escupe de costado, indiferente,
unos pedazos de mi alma entre los dientes.


Tu lengua brotando del centro de los labios
casi viva en el gris acero de la imagen
contrasta fina y aguda con el blanco de la ficha.
Ella no dice nada, solo mira y escucha.


3.


Recupero el habla, casi, por así decirlo y,
aunque gané algo de tiempo con la treta de los versos,
el impacto de la pequeña máscara blanca
me deja temblando, frágil
como el papel que la contiene,
frágil, más frágil aún.


4.


Desde el fondo de la tierra,
asesinada, perseguida, loca y enferma,
las caras de las hijas de la Medusa,
emergen, leves, desde la oscuridad
cautivadas por la blancura de la hoja.


Las recibo con un pavor agradecido
crepitando
y sin saber qué hacer con ellas
de ahora en adelante.


5.


Entre la distancia que va de un hebra a otra
escondido en la maraña de tu pelo
espíritu desconocido te habita en silencio
te habita.


NARANJAS EN LA NOCHE (Naranjas de medianoche)


Suenan hueco contra el suelo las naranjas del naranjo
al caer
en la noche
sobre la terracita para la hora del té.


Desde la cama tibia
el golpe estremece a la familia
como la paletada de tierra
con una que otra piedra
golpeando el cajón del último enterrado


Son naranjas de medianoche, esas que sangran al amanecer

Alexis Figueroa


Alexis Figueroa. Concepción, 1956.
Nacido en Concepción, en 1956. Ha publicado Vírgenes del sol inn Cabaret, Vien Benidos a la máquina, 1986, reeditado el 2007 por Ediciones del Temple; Vírgenes del sol inn Cabaret, segunda elaboración, Premio Casa de las Américas 1986; El laberinto circular y otros poemas, 1996; Extractos de Folclórica.Doc (resultado de una beca de creación del Consejo del libro y la Lectura, Chile, 2003). Dedicado a múltiples, asistemáticos y eventuales trabajos que incluyen desde la pintura (de casas), arreglo de computadores, planificación y gestión cultural, hasta la investigación documental. Vivió durante un tiempo en Santiago de Chile. Durante este tiempo conoce inicialmente Jesús Sepúlveda, Víctor Hugo Díaz, Guillermo Valenzuela y Jaime Lizama. Con ellos conforma la Revista “Piel de Leopardo” (1994) un antecedente algo mítico del universo cultural de esos años. Durante sus ocasionales visitas los días lunes a la Sech, en el “Refugio López Velarde” acostumbra juntarse con José María Memet, David Bustos, el Sr. Dibujante, Víctor Hugo Díaz, Eduardo Robledo, etc. Allí, bebe y conversa. Es en uno de esos lunes cuando el poeta Julio Carrasco decide encadenar –por fuera- las puertas de la institución, en una iniciativa antediluviana. Publicó alguna vez una revista de nombre “Tantalia”. Fue muy buen amigo de Harris, durante largos años en Concepción. Fue amigo de Sergio Parra, quien lo amparó un largo tiempo en su casa en Santiago. Con el tiempo se distancia la amistad, pero queda la imagen de tiempos que fueron. Actualmente trabaja en la gestión del Centro Calaúcan. Se dedica a escribir. Diversas cosas. Poesía y cuentos de ciencia ficción. Figura en la Antología de Ciencia Ficción Chilena “Años Luz”, editada por Marcelo Novoa.


Menciona a:

Malú Urriola
Egor Mardones
Germán Carrasco
Julio Espinoza G.
Damsy Figueroa.
Elicura Chiuailaf
Jose María Memet.
Jesús Sepúlveda
Guillermo Valenzuela.
David Bustos.
Paula Ilabaca.
Manuel Silva A.
Yanco Gonzales C.


Textos.

Tonada de la sirena en el charco de agua

La sirena tiene
la boca roja porque no tiene sexo.
La sirena tiene la boca roja de los amantes.
Tiene su pozo de pura escarcha,
tiene su ojo.
De puro sexo, de boca de agua.
(La sirena tiene dos formas,
como los cuerpos de los amantes).

La boca roja de los amantes:
se abre en un pozo de pura sangre,
alguien le habla a la sirena:
es la voz de agua.
Alguien le habla a la sirena:
es la voz tierra, del marinero.
Grita en la niebla, grita en el faro
grita en la sangre del accidente.
Grita en su charco.
Grita y no puede abrir sus piernas
y si las abre,
es que han rajado la carne blanda
con el cuchillo del pescador.
O alguien que aúlla, mientras la sangre,
se le desliza desde la boca hasta la calle.
La sirena vive en un charco.

De vino blanco.
Y cuando vienen a remojarse
gañanes idos de soledá,
pa fantasearla de pura sangre,
sangre menstrual,
abre su boca.
La boca cruel.
La boca roja de los amantes,
la boca luz, que gira y gira,
con cuerpo e paco o de ambulancia,
la boca tajo,
donde se asoman los huesos blancos,
donde se asoman los sapos zarcos
cantando a coro con la sirena de la ciudá.

De Folclorica.doc


Cosas. (Lírica del campo bajo fuerte luz.)*.

Cuando las cosas son de color blanco,
y vienen alineadas como dientes.
De muerto, como dientes de piano.

Cuando quien te habla es una boca
con dientes de marfil con huecos negros.
Cuando en el blanco hay costra o caries.
Cuando vienen cosas, cosas,
con forma de ataúd.
Y la voz les sale desde un hueco,
una voz con manchas negras,
salpicada.
Cuando vienen más, y vienen más,
con tos blanca de bronquios sin saliva,
cosas mondas, secas, sin carne y piel.

Cuando escuchas el ruido de las cosas.
Todas redondas, haciéndote rodar.
Cuando son de color blanco
y vienen con demasiada luz.
Cuando el silencio está manchado,
cuando gira, cuando es sábana
y es engranaje de molino
y el polvo cae, cae, ceniza, harina,
cal de hueso,
y ya no hay fuego.

Cuando pasas, como una piedra negra
sobre blanca,
llevando tu propia leña hasta la hoguera.

Y exhibes tus días ensartados, blancos, como perlas.
Redondas perlas.
Con un centro negro, un agujero.
Con un eje oscuro en el centro de la vida,
haciéndote rodar.
Cuando estás solo.

De Folclorica.doc


Fui a hablar con la cabeza olmeca de mi población.
Muertos de harina arcillosa.
Se le dijo: busquen el amor.

Galga sucia de los vegetales.
Se les dijo: busquen el amor.

Parejas drogotas, sudacas, mexicas.
Ojo de cíclope, catedral cueva oscura.
Se les dijo: busquen el amor.

Pavores, pelusas de la humanidad.
En los mundos de arriba y los mundos de abajo,
el jade esmeralda, corazón sin costilla,
busquen el amor.

Sin luna, sin torre ni estrella.
No pidan de merca, no pidan remedio.
Busquen el amor.

Pescado de padre y redoma de madre.
Busquen el amor.

Pupilas de lobo,
en las gotas de sangre de las amapolas,
busquen el amor.

Bestias que comen de la mano oscura,
iluminen el fuego,
acompañen la hoguera,
busquen el amor.

Fui a hablar con la cabeza olmeca de mi población
y me dijo:
recuerda los témpanos blancos de los condenados,
recuerda el ajenjo y sus dientes,
jadeando en la oscuridad.

Cuando se abra el Terror, cuando caiga la torre,
cuando caiga la estrella.
Entonces, entonces busquen el amor.

Amor polvo de torres limadas por el viento oscuro.
Estrella encendida en su cripta
de ciega y carbón.

De Gótico urbano de confesión



(Poética de los dones de los condenados.
En casa del ahogado el ponche es de piedra y agua.
En casa del fusilado el aire es de viento oscuro.
En casa del ahorcado cardan la cuerda de la campana.
En casa de las suicidas ordenan un calendario:
lleva escrito los días y la forma en que hay que morir.
En casa de los quemados el sol y la cicatriz.
En tu casa, en la mía, en casa de Todo, el reloj.
En casa de los amantes, la sangre.
Bebida en un vaso de dos.)

De Gótico urbano de confesión


Poema apocalíptico final


En la escena aparece una palabra no muy grande.

Es verde claro y arranca por la selva tropical
La selva es verde oscura, está llena de ruidos.

En las alturas los pájaros se refugian en sus nidos.

Aparece otra palabra aún más grande.
"Didascalia"puede ser, o "calipigia".

(También es verde clara y contra el fondo
se distingue con gran dificultad).

Lianas, enredaderas, árboles y arbustos,
orquídeas, aborígenes, animales que dan susto.

La palabra chica arranca de la palabra grande.

Ruidos de persecución, chillido y grito.
Cae la noche lentamente en el abismo tropical.

La palabra grande atrapa a la pequeña por la pata.
La palabra grande se solaza como gato entre las ratas.

La palabra grande engulle una vocal con parsimonia,
mientras descansa echada en un tronco milenario.

La palabra grande se sienta en un escaño,
mientras mira por la tarde la TV.

(Y usa una servilleta cuadrillé).

Su digestión tiene la forma de un soneto,
derivado de las artes del panfleto.

Con un palito escarba en el cadáver de la palabra chica,
yacen letras aplastadas bajo la gigantesca pata.

Ella, indiferente, se baña en los géiseres de luna,
después se envuelve en una albina bata.

"Corten" dice el director, "todo está malo".
"No saben actuar" les asegura.

Ahora las palabras caminan abrazadas,
buscando un bar para olvidar.

Penetran en un tugurio miserable. Piden vino.
"Trae trago" dice una, "trae trago Marcelino".

Les traen un pequeño monosílabo crocante,
que la mayor coge delicadamente, con sus guantes.

(Comen en silencio: caníbales degustando un canapé).

Piden pan, más vino y ensaladas:
se sienta entre los dos una palabra con pestañas
encrespadas.

Pide fuego. Las palabras sacan fósforos.
La palabra saborea lentamente una chupada.

Más tarde las palabras sentadas a la mesa,
ríen dando muestras de embriaguez.

Han olvidado su fracaso como actores.
Y regresan muy contentas al laberinto circular.

De El laberinto circular y otros poemas.


Marcelo Guajardo Thomas

Marcelo Guajardo Thomas. Santiago 1977. Ha publicado Teseo en el mar hacia Cartagena. Ediciones del Temple. Santiago 2001; y El Dolor de los Enjambres. Ediciones Etcétera. Concepción 2004 

Menciona a: 

Juan Cristóbal Romero
Rosario Concha
Rafael Rubio
Alejandra González

Cinco Comarcas
(selección febrero 2007)


Abdomen de pez

Aquello rasgando desde la palma
el pulgar atorado al vértice y el surco
que corta el henchido tallo. Principio.
Trozo de agua. Pulpa. Raíz abultada del tacto.


Joven Mercader

A la medialuna. mordida por la piel
el circulo convexo y los acantilados. Rodean.
el manto transparente donde el agua
va y regresa a la luminosa caverna.

La sangre nace y tiembla bajo el domo.
Vestigio donde habita la serpiente.

Primero la carne. Primero la carne.


Mar de la sangre

Extenuada. Caliente.
Al amparo del granito y la arteria
que inunda el enorme páramo.
Tendón. Astilla. Partícula de partículas.
Fuego, tizón, roca que marcha. Escalda aquella
brasa sanguínea que abomino.



Refugio del viento

Anclado al espacio, cuelga de la raíz
un inmaterial sofoco, luz que escurre
desde el hueco y orada el estrépito
del silencio inmóvil del junco y el oso.

Una caverna tras el laberinto
Donde las dagas se hunden
en el corazón del extenuado muchacho.

Palacio celeste

El agua que tributa
en las escalas del palacio
un carnero para el sacrificio.
Entre la cuenca y el abismo
la meseta del buey. Su fuerza.
La mandíbula allí. Lentamente.
Tritura la hierba que crece en el estanque.

Montañas Kuen Loun

Al final de la depresión
se levanta el observatorio
y el iris del hueso, vigilando
el guijarro que cercano
evita el lugar donde
la nieve lo ha cubierto todo.


Máquina terrestre

Un óvalo que abraza
la intensa forma. Cercado.
Por la tierra y el mecanismo
la gruta donde precipita
el sonido que escampa
luego del continuo escarmiento
de la carne nueva sobre la tierra.

Curva del estanque.

El fango invisible, luego
de la curva que explora
el cartílago y el vientre
allí, donde el agua escarba,
un trozo de espacio que no existe.
La huida precede el bostezo del pescador.


Pantano joven

Cubre el limo, el vestigio
próximo a la piel azul de la salamandra.

Leve temblor de la carne y las ciruelas.


Cinco comarcas

Descuelga el nudo hacia el triángulo
De la iracunda colina.
Trepa. Hincha. Retrocede
Hacia el desfiladero y huyendo
la infinita luz de la caravana.

Teresa Calderón


Fotografía: Mancini

Teresa Calderón nació en La Serena el 30 de marzo de 1955. Se tituló como profesora de Castellano y estudió Licenciatura en Estética en la Universidad Católica de Chile.

Ha ejercido la docencia en distintas universidades chilenas, tanto en programas nacionales como internacionales, dictando cátedras de literatura latinoamericana. Actualmente dicta clases en la Escuela de Periodismo de la Universidad de Chile y en la Escuela de Literatura de la Universidad Finis Terrae, y dirige talleres de poesía y de escritura autobiografía.
Poeta, cuentista y novelista, dirige talleres de creación literaria desde los años 80, y, desde entonces, también, ha participado en Congresos de literatura en distintos países. Parte de su obra ha sido traducida el inglés, francés, sueco, italiano, alemán y portugués, y ha sido seleccionada en más de 30 antologías. Entre sus publicaciones de poesía se destacan: Causas Perdidas, Género Femenino, Imágenes Rotas, Aplausos para la memoria y Obra Poética. Es coautora de la Antología “Veinticinco años de Poesía Chilena: 1970-1995”, Ed. Fondo de Cultura Económica, 1996. En narrativa destacan: Vida de perras (cuentos), Amiga Mía (novela) y Mi amor por ti (novela). En novela infantil: Aventuras de Súper Inti y Analfabruja, El tesoro de la bruma, Esa mañana llovía a cántaros azules y Súper Inti y el misterio del espejo.

Entre los principales premios se cuentan:
Primer Premio Concurso de Poesía El Mercurio 1988.
Primer Lugar Concurso Ministerio de Educación 1989.
Premio Pablo Neruda 1992.
Premio Consejo Nacional del Libro y la Lectura 2004, mejor novela editada por
Amiga Mía, de Editorial Alfaguara.
En el año 2006 fue Escritora en Residencia en la Universidad Católica de Chile.

Ha participado en congresos literarios y ferias del libro en Chile, Argentina, Suecia, México, Estados Unidos, Colombia, Uruguay, Perú, Bolivia, Cuba, Alemania.


Menciona a:


Carolina Celis
Luisa Ballentine
Patricio Mujica
Alejandra Basualto
Carmen Gloria Berríos




Poesía:


Del libro: El Poeta, la Muerte y otras Maravillas.

¿POR QUÉ EL POETA Y NO MÁS BIEN LA NADA?


PRIMERA PARTE

"¿Cuál es más loco:
el que lo es por no poder menos,
o el que lo es por su voluntad?".
Cervantes

YO ANTES ESCRIBÍA POESÍA

"Otros han hecho cosas peores".
Mi abuelita (siempre me lo decía)


CAPÍTULO I

"Acerca de algunas frases que se tiran al aire y que para colmo de males, éste no se las lleva; frases que ni siquiera entran por un oído para salir por el otro y ciertos sucesos dignos de ser contados".



A SABER


¿El poeta nace o se hace?

Un poeta es un poeta

El poeta del año 2.000
Fines de siglo para el poeta

El poeta = 1% de inspiración
99% de transpiración

De poeta y de loco, todos un poco

Desafío de la página en blanco
o de la mente en blanco
del poeta

Cada poeta como un blanco
de la artillería de otros poetas.

EXPLICO ALGUNAS COSAS

entre poetas no nos vendamos pailas de cobre

El poeta nace
nace desencantado
vociferando a mares
o haciendo mutis por el foro
hasta que el médico le manda
el primer bofetón

Si el poeta golpeara primero
golpearía dos veces.


EL POETA NACE

Nace sin el don de la palabra
Dios lo guarde

Se toma su tiempo para armar una frase coherente

Si naciera hablando
y traspusiera los umbrales de la muerte súbita
aún podría optar a ingeniero comercial
banquero
bolsero
ganador de la polla gol kino raspe y gane o el loto.
Flor de poeta

Si naciera hablando
mandaría a medio mundo a buena parte.


LO CIERTO ES QUE EL POETA SE HACE

no controla esfínteres cuando nace
el poeta se hace en los pañales
se hace en su santa madre que lo parió



ERGO

el poeta nace cuando se hace
se hace el loco y la modestia aparte

El poeta nace cuando se hace el poeta

Todos alguna vez se hacen.


EL POETA NACE SIN VER
MÁS QUE PENUMBRAS EN LAS COSAS


no ve una

No hay peor poeta que el que no quiere ver

Si pudiera ver
pediría injertos de ojos en todo el cuerpo
para atrapar el mundo y un mismo hecho
desde toda posible dimensión

Entonces no sería poeta

Sería el poeta Deformes
la Mosca
Allien
E.T.
la Forfícula
el poeta Barata.


AFORTUNADAMENTE EL POETA NACE

sin oír si no los ruidos

Si escuchara lo que se dice
alrededor de su cuna

no es problema de lenguaje
no hay idiomas preferenciales

pediría ser sordo como tapia
sordo de la sordera misma en sí
tapia intraspasable por lisonjeros
aduladores envidiosos y gusanos

Esto me han buolto míos enemigos malos.


UN POETA ES UN POETA

poeta de tiempo completo
peso completo
poeta medio gallo pesado

Poeta virgen
que le copia a todos

Poeta pendenciero belicoso curagüilla
bacán tollero fulero
hombre mujer
de la calle la ciudad rural de la academia
unión chica

Poetas que no están ni ahí con nadie
y nadie está ni ahí con ellos

Poeta de las alturas torres san Borja del Paine
de las bajas pasiones poeta mayor mayorcito
menor de edad
posmoderno filibustero

Poeta con horario de oficina
ni se movió de su escritorio.

UN POETA ES UN POETA

un tipo que se las cree todas
se pasa películas
y llora como ninguno

cree
que la poesía es una isla
hay que llegar como sea

A aletazo limpio aplica la eutanasia

En su opinión casi todos los poetas son malena
les falta algo
descuidan el oficio
no tienen nada que decir
y sus proyectos son poco interesantes
en fin
su existencia viene a ser de suyo irrelevante.


ALGO ASÍ COMO QUE

un poeta es un poeta
y dos son multitud.


EL POETA ES UN DIOS CUANDO SUEÑA

y un mendigo cuando piensa

Cuando piensa cómo liquidarle la reputación
a otro poeta

Cuando se alegra si el amigo poeta le confiesa
ya no estoy escribiendo poesía

Cuando piensa que él es único
y destinatario de todos los honores
lógicamente
instalado en una época
incapaz de comprender
tal dechado de virtud y maravilla

Cuando piensa
que él y sólo él
es el Poeta.


CAPÍTULO II

"Acerca de lo que aconteció al poeta cuando dejó de escribir en virtud de la iluminación divina y de otros sucesos tan ridículos como verdaderos que según el narrador desta historia no pueden dejar de contarse".


YO ANTES ERA UN PECADOR

También escribía poesía
me arrastraba por las oficinas públicas
y privadas con mis proyectos

Tan pecador fui

Alguna vez me datearon llamaban a concurso
divúlguelo ponga afiches délo a conocer

Yo ni leso
no le avisé a nadie
me lo gané

El bálsamo del financiamiento se derramaría
sobre mis cuitas

Como era un pecador gasté mucho dinero
tomando en el Valle de Lágrimas
el Biógrafo el Cuervo la Mulato Gil
-triángulo de las Bermudas-
donde me convertí al alcoholismo
temporalmente

Qué no hice para ser publicado
en cualquiera revista antología tríptico
folleto antología


UNA NOCHE EL MALIGNO ME TENTÓ

después de un patache feroz
en el Vatelli
una tarde en que no había huelga
de trabajadores
el Bellaco vino a mis sueños
agitando un fajo de poemas:

Oye Perico, toma a tu mujer y a tu hijo y parte al sur.
Ahí está ahora la taquilla.

Como mi mujer me había abandonado
se lo conté a mis amigos
dijeron no hagas caso
es el delirium tremens poeticus
Esa frase me gustó
con ella escribí mi más celebrada creación.

Me venían espasmos de lujuria
al ver la cara de amor al prójimo
que traían las señoras de los políticos
para oírme leer desde sus sitiales de terciopelo rojo.

Hasta que me vino el parkinson cuando vi
la palabra RESENTIDO escrita con spry
en la puerta de mi casa.


QUERÍA TANTO SER POETA

y me fui a la isla Grande
Llovía y llovía por sobre todas las cosas
mientras yo estaba encerrado en la casa
pasado a humo
tratando de secar el poncho
y los mitones
meses y meses oyendo caer la lluvia
y galopar sobre los techos
con su galope de infancia en la frontera
o donde fuera
Pero era poesía pura del sur para poetas del sur
escribiendo famosos poemas del sur.

PERO VOLVIÓ EL MALULO A TENTARME

-Hay que atinar, me dijo

-Ándate al Norte, siguió

Allá no está pasando
nada
se pierde
con probar.




INSTALADO EN EL VALLE TOMÉ LOS HÁBITOS

me pelé al cero y me puse a esperar

Mis poemas sureños no gustaron a nadie
-débiles y aguados, dijeron
Tuve sequía de palabras
y la boca se me llenó de arena

Alguna vez divisé puntos luminosos

No era la poesía

Naves plateadas con seres plateados
que se materializaban
para hacerle visitas de cortesía
a la Hermana Cecilia
y a las tías del Anticristo
unas poetas medio jóvenes aún
que me tuvieron sobrado de cariño.


DE REGRESO A LA ZONA CENTRAL

Región Metropolitana
antro de perdición
encontré ene poetas Ene Ene
abanicándose con ene tipo de rollos

Discursos propuestas proyectos
le tengo
sacar a cien sacar a cien
para los regalones

Yo no vengo a vender.


DIME CON QUIÉN ANDAS Y TE DIRÉ
QUE NO HAY MAL QUE POR BIEN NO VENGA


Mi amistad con los jurados
no rindió frutos

Gasté el resto de la beca
invitando poetas
amigos del arte
allegados al artista
críticos y criticonas
convivientes
a tremendos asados y cocimientos
Tuve que oír sus lamentos y carencias poéticas
en pavorosas obras completas
que según el nivel etílico crecían y crecían
como las habichuelas mágicas
y yo tenía que seguirles la corriente
lo corriente
me pedían opiniones, consejos, sugerencias


DE CUANDO EN VEZ

sin darse cuenta
me regalaban una imagen
una metáfora no muy gastada
una metonimia no muy revenida

Y puesta entremedio de mis versos
parecía plantada por mi mano tengo un huerto


YO ANTES

Yo antes era un pecador

Pero el Señor
se apiadó de Mí

Me iluminó

Y dejé de escribir.


GLORIA A DIOS


Clemente Riedemann


Clemente Riedemann, Valdivia (Chile), 1953.
Ha publicado:Karra Maw'n, Ed. Alborada (1984); Primer Arqueo, Ed. El Kultrún (1989y 1991); El Viaje de Schwenke y Nilo, Ed. Tamarcos (1990, crónica); Karra Maw'n y Otros Poemas, Ed. El Kultrún (1995); Gente en laCarretera, Ed. El Kultrún (2001); Isla del Rey, Ed. El Kultrún (2003). Ha sido parcialmente traducido al inglés, alemán, francés, italiano, coreano, rappa nui. Incluido en diversas antologías generales ytemáticas, chilenas y extranjeras, a partir de 1985. Ha escritoteatro, reseñas, artículos de opinión y canciones populares.


Menciona a:

Claudio Bertoni, por su humor
Rosabetty Muñoz, por su laboriosidad
Javier Bello, por su transparencia
Antonia Torres, por su alegría
Oscar Barrientos, por su camaradería


EL REGRESO DE MONGA

Un plato sobre la mesa
un pescado
un montoncito de arroz
la hebra de pimiento rojo
en los labios del hombre
abandonado

la puerta volteada sobre el suelo
arrancada de cuajo

la silueta de una mujer
parada en el pórtico


BELLE DE JOUR

Desde la neblina
los ojos de una mujer
su deleitoso talle
los zapatos rojos

un hombre se acerca para abrazarla
con infinito amor

la niebla se desvanece
el sol alumbra el mundo


MARIA JUANA

Las nubes están nubeando
los esteros estereando
los pájaros adivine usted
los huevos ya se sabe
el corazón también
y la Mari, especialmente.


Eres como el amanecer en los campos

Desnuda aún dormida
entre las sábanas
te sueñas nube
junto a los cerros
del amanecer

mientras oigo el rumor
de la ciudad que se levanta
la visión de tu cuerpo
lava mi rostro
como antaño hacían los esteros
en la infancia

eres como el amanecer en los campos
húmeda, fresca, fragante

y pájaros que cantan a lo lejos


Rico rico rico

Las gradientes de los espacios rurales
el cruce bajo los pórticos de las casas del pueblo
el ñadi húmedo en las suelas de tus zapatos rojos
y de mis zapatos negros
contentos de caminar con las nubes
es rico contigo

los nudos en la madera del cielo raso sobre tu cama
el graznido de los treiles al amanecer :
"estás con ella, que no te importe más nada
disfruta este momento maravilloso
su olor de hembra respirando en el sueño”
qué rico

entrar en ti como en un cerezo en flor
el viento mañanero entre las ramas
abiertas
extendidas sobre un horizonte sin tiempo
sin deudas ni expectativas

con la memoria y los anhelos
fundidos en un abrazo
rico rico rico

Paula Ilabaca


PAULA ILABACA NÚÑEZ (Santiago, 1979) es Licenciada en Letras con mención en Lengua y Literaturas hispanoamericanas de la Universidad Católica y Profesora de Castellano de la Universidad Católica.


Publica su libro “Completa” en la Editorial del Contrabando del bando en contra, en el año 2003.
El movimiento de sus poemas en diversas revistas literarias y antologías como “Círculo infinito” de Editorial Al margen, en el año 2002 o “Cantares, nuevas voces de la poesía chilena”, Editorial LOM en el año 2004, permite que su trabajo se conozca entre los jóvenes poetas de su generación. En el año 2005, aparece publicada en el antología “Cuatro cuartetos: Cuatro poetas recientes de Chile”, Editorial Black & Vermelho, publicada en la ciudad de Buenos Aires.


En las lecturas que ha participado se encuentran, entre tantas otras: Primer encuentro internacional de jóvenes poetas Poquita fe, Santiago de Chile 2004; Salida al mar: segunda edición, festival de poesía internacional realizado en ciudad de Buenos Aires; AQPoesía en ciudad de Arequipa y XIV versión del Festival Internacional de Poesía Bogotá en la ciudad de Bogotá, ambos en el año 2006.


Desde el año 2005 comienza una nueva etapa en su particular forma de hacer poesía. Junto a Nicolás Morán crean Her own and private soundtrack, instalación en la que se mezclan la voz y performance de la autora, acompañada de la guitarra eléctrica de Mario Cáceres y el bajo y genio de Nicolás Morán. Ambos músicos son licenciados en Sonido de la Universidad de Chile.


En el año 2006 recibe la Beca de Creación Literaria entregada por el Consejo Nacional de la Cultura y de las Artes, la que le permite publicar en Editorial Mantra su libro “la ciudad lucía” en conjunto con su disco homónimo.


paulailabacanunez@gmail.com





Menciona a:

Eugenia Brito
Héctor Hernández Montecinos
Ernesto González Barnert
Pablo Paredes
Nadia Prado
Felipe Ruiz
Malú Urriola




Poesía:


lucía
canta


“She makes me wanna die”
Tricky.


bésalo por mí mamá
cuando se duerma
para que no tenga más pesadillas no
para que tenga un poco más de
compasión
bésalo en la boca mamá
cuando se duerma para que le saques mi corazón
de entre sus dientes
para que se lo saques
y todo quede sellado mamá
lucía di y que todo quede sellado
en la forma mamá
en esa manera que tiene de morder
incluso mientras duerme

***

por ejemplo al momento de la partida
por ejemplo al momento de querer proteger
me por ejemplo cuando escucho su respiración
bésalo por mí mamá mientras yo escucho
que hay una turba esperando por su contorno mamá
una turba
que no deja de chillar qué es un ángel? qué es un ángel marrón?

***

al momento de ceder mamá al
momento de apretar
cuando bate las alas escupe
y me llena la cara de barro
cuando bate las alas y no puedo respirar
o como cuando se queda
en un rincón de la ciudad
y hostiga
por ejemplo mamá esa es su nueva forma de
joder
lucía dice se queda en un rincón
con los ojos cerrados y dice mientras duermes
y dice se supone que esta noche no debes
dormir
mi niña mi
pedacito carmesí
se supone que esta noche no debes
siquiera pensar en poder dormir
porque mientras yo pateo y jodo en el barro
la ciudad no
la ciudad no descansa no
la ciudad solo debe padecer
lucía di
la ciudad solo debe padecer

***



(recuérdame como si fuera la última gota que cayó
sobre tu hombro
recuérdame como cuando la sangre y el barro
no me dejaban respirar
recuérdame como esa arista desnuda de la ciénaga
ángel ángel
recuérdame como cuando rezaba para poder acabar
junto a ti
se apagan los rezos
se apagan las luces de la ciudad se apagan
se apagan los violentos
las violentas heces que sacaste de mí
se apagan los llamados el sonido de tus alas se apagan
se apagan ya no sé más de mí
ángel ángel
ya no sé más de mí)

***




me merezco la cara llena de barro?
lucía se pregunta en la manía de su comisura en esa manera que tiene de
me lo merezco me lo merezco
el corazón que chorrea tanto barro mamá me lo merezco?
me lo he lavado me
lo he sacado sin compasión
por las noches mamá cuando nadie ve
cuando se supone que debo dormir
cuando el ángel me mira desde el barro
cuando el ángel se me acerca volando
yo no sé mamá yo no sé
cómo vuela con el barro pegado a las alas
yo no sé cómo
se puede volar
pero se acerca mira cómo se acerca
bésalo por mí mamá
cuando lo veas dormir
antes de que vuele mientras duerme
y sácale mi corazón de entre los dientes
para lavarlo
para sacarle el barro que chorrea
hasta que mi pobre corazón me diga que no
lucía dice
hasta que me quede limpio
me merezco todo este barro mamá en mi
me merezco todo este barro en mi corazón?